Madrid/Huelva, 11 de diciembre de 2019.-  La industria andaluza comprometida con el medio ambiente ha estado representada en la Cumbre de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP25) que se celebra estos días en Madrid de la mano de la compañía Atlantic Copper, cuyo consejero delegado, Javier Targhetta, y su director de Innovación y Tecnología, Guillermo Ríos, han sido ponentes en esta cita.

Targhetta ha considerado que la Conferencia de la ONU para el Cambio Climático es una enorme oportunidad para que el mundo entero, sin excepción, se comprometa a dejar un planeta plenamente habitable a las generaciones venideras.

Javier Targhetta, que ha participado como representante de Atlantic Copper y como presidente de la recién constituida Confederación Española de las Industrias de las Materias Primas Minerales (PRIMIGEA), destacó en su intervención que afortunadamente, desde hace poco más de un par de décadas, el mundo o una parte importante de él, se preocupa, además de por el bienestar del ser humano, por la salud del planeta, desde el convencimiento de que no hay un plan B para un planeta destrozado.

El cambio climático se está produciendo y tiene origen antropogénico, ha asegurado el consejero delegado de Atlantic Copper, que ha señalado que la preocupación por este fenómeno se está traduciendo en iniciativas concretas, con objetivos como la descarbonización, la transición energética y la electrificación.

Además, existe en la sociedad en su conjunto una mayor concienciación, incluyendo tanto a gobiernos como a sociedad civil, de la necesidad de un uso responsable de las materias primas que son necesarias para el logro de los objetivos anteriormente citados, tal y como ha expuesto el consejero delegado de Atlantic Copper.

Targhetta ha señalado que el acceso responsable a las materias primas ha sido, precisamente, uno de los motivos que ha llevado a la constitución de PRIMIGEA a nivel nacional hace escasas semanas. El diseño, uso, reutilización y reciclaje de las materias primas, el mantenimiento y mejora continua de la salud y seguridad de los empleados y de las poblaciones del entorno geográfico en el que se desarrolla la actividad; la mejora continua del desempeño medioambiental; la contribución a la conservación de la biodiversidad y a los enfoques integrados de planificación territorial y la contribución al desarrollo social, económico e institucional de las comunidades situadas en las áreas de operación se encuentran entre sus objetivos fundacionales.

Por su parte, el director de Innovación y Tecnología, Guillermo Ríos, ha presentado en el marco de la COP25 el proyecto europeo RedScope, financiado por el EIT Raw Materials, que tiene por objetivo conseguir la máxima recuperación de las aguas empleadas en los procesos de la empresa metalúrgica, de modo que gane en eficiencia y sostenibilidad.

Ríos ha avanzado algunos de los aspectos más importantes del proyecto, que cuenta con la coordinación técnica de Suez, encargada de la definición y diseño de la línea de proceso, a su vez apoyada por Cetaqua, Centro Tecnológico del Agua, y el Instituto Sueco de Investigación Ambiental (IVL), encargado de la caracterización y estudio de la posible valorización del residuo que se genere en el nuevo proceso.

Como parte del proyecto, se ha diseñado un prototipo de filtración avanzada complementado con diversas tecnologías de membranas que permitan recuperar la mayor parte del agua (alrededor de un 90%). Esta agua, de calidad adecuada para ser usada como agua de proceso, será enviada de vuelta a la fábrica, reduciendo el consumo de agua fresca y, por tanto, la huella hídrica.

Para Ríos, el cobre procesado es un elemento circular per se. Es reutilizable en un 99%. Por este motivo, uno de los objetivos estratégicos de nuestra compañía es circularizar el proceso productivo: haciendo un uso eficiente de recursos naturales como son la energía o el agua. Por otro lado, el responsable de Innovación de Atlantic Copper considera que uno de los puntos clave para el futuro es la colaboración con otros agentes (públicos/privados). No puede ser de otra forma. Es el caso de acuerdos con universidades europeas y españolas; o liderando proyectos europeos relacionados directamente con la Economía Circular, aclaró.

Según ha manifestado Ríos, en el caso de nuestra fundición el objetivo es, como en el resto de las empresas, producir más cátodos de cobre y generar otros productos (silicato de hierro, lodos y ácido sulfúrico) con el menor consumo energético posible y menor impacto ambiental. ??se es el concepto de ecoeficiencia. De este modo, la certificación de nuestro Sistema de Gestión Energética garantiza que la empresa hace un seguimiento de sus consumos de energía e intenta reducirlos mediante proyectos ahorro energético o de recuperación del calor generado en nuestros procesos.

Como consecuencia de las inversiones en medio ambiente realizadas en el Complejo Metalúrgico de Huelva, más de 80 millones en diez años, Atlantic Copper se ha alzado en 2018, por segundo año consecutivo, con el primer puesto a escala mundial en eficiencia energética por tonelada de cobre producida, según la clasificación elaborada por la consultora especializada Wood Mackenzie: en concreto, 611 kilovatios/hora por tonelada de concentrado de cobre fundido, en cifras exactas.